Capítulo uno: Primavera en el Complejo Nevado: problemas de matemáticas y misterios

CHICO.(Pensando.) ¿Por qué las vacaciones son tan cortas? Me parece que fue ayer cuando dejé este lugar. Los pinos aún guardan nieve entre sus ramas. Es un paisaje impresionante; podría disfrutarlo, si no fuera porque apenas puedo verlo. Este autobús va hasta la madre; debo tener cuidado con dónde pongo mis manos. Aunque me pregunto cómo sería si este fuera el autobús de las chicas… Maldición, estoy tan apretado que ni siquiera puedo fantasear. Por eso siempre espero al último autobús, para evitarme estos problemas. Pero hoy tuve que hacer una excepción, ya que es el primer día de clases de mi hermanita… ¡Por fin, ya puedo respirar aire fresco! Este no es un año como cualquier otro en el Complejo Nevado; así es como se le conoce al conjunto de los tres colegios: Magia, Alto Rendimiento y Chamanismo, todo en un mismo lugar. Aunque los tres colegios pertenecen a un mismo complejo, el acceso es muy restringido; solo los alumnos de dichos colegios están autorizados para ingresar en ellos. Si se piensa lo contrario, es meterse en grandes problemas… Bueno, siempre y cuando te descubran. Este es el año donde comienza la primavera, donde las chicas se despojan de su uniforme de monja y nos revelan todos sus atributos…(En voz alta.) Claro, lo olvidaba. Mi nombre es LEO, tengo dieciséis años y aún sigo con sueño después de haberme levantado temprano. Pero tiene sus ventajas: mientras estoy esperando a mi hermanita MARINA, podré ver pasar a las chicas.

Por un momento, LEO queda inmerso ante tanta belleza entrando por sus pupilas.

LEO.(Pensando.) Sí, de eso es de lo que estaba hablando. Mmm… Esa chica, ¿dónde la había visto? ¡Ah, volteó a verme! Pero… ¿qué le pasa? ¿Por qué me mira de esa forma? Maldición, las chicas que se hacen las interesantes siempre son las más difíciles.

Una voz lo llama a lo lejos; sin embargo, a LEO le parece muy famILIar, ya que su semblante cambia de inmediato.

LEO.(Con curiosidad.) Me pareció escuchar a MARINA.

Dos chicas muy hermosas se dirigen justo donde se encuentra LEO. La de aspecto más simpático y tierno es la primera en hablar.

MARINA.(Con una sonrisa.) Hermanito, por aquí…

LEO voltea rápidamente hacia los lados para ubicar a su hermana; a pesar de haberla escuchado sin problemas, es un poco problemático encontrarla por el gran número de alumnos y alumnas que están ingresando al Complejo Nevado.

LEO.(Aliviado.) MARINA, por fin. Justo a tiempo. Ya empezaban a pasar puros CHICOS.(Reconoce a EMILYy comprende por qué tardaron tanto. Aparte.) Ella es MARINA, mi hermana menor; de hecho, tengo otra hermana. Y, si lo están pensando, no, lo siento, yo soy el de en medio. Y, créanme, no se lo deseo a nadie, y mucho menos tener una hermana mayor como la mía; es simplemente aterrador. Bueno, MARINA es la más pequeña, como han podido advertir. A diferencia de mi otra hermana, ella es pequeña, tierna, amable, y ama los chocolates.

MARINA.(Apenada.) Lo siento, hermanito, por hacerte esperar.(Siente que EMILYhizo que se retrasaran a propósito.)

La chica que acompa