: Abigail Owen
: El reinado de las sombras
: TBR Editorial
: 9788419621900
: TBR
: 1
: CHF 8.00
:
: Kinderbücher bis 11 Jahre
: Spanish
: 704
: Wasserzeichen
: PC/MAC/eReader/Tablet
: ePUB
Reven me ha dado las sombras del rey. Intento no caer rendida ante su poder, pero las sombras luchan por apoderarse de mi cuerpo y de mi mente. Todo ha cambiado, ya nada ni nadie es lo que era. Estamos en una batalla a contrarreloj. Y Eidolon, más poderoso que nunca, hará lo que sea por vernos muertos. El futuro de nova está en nuestras manos. En la conclusión de la trilogía 'Dominios', la oscuridad amenaza con invadirlo todo.

Prólogo

Alprincipio


Eidolon


Mil años atrás...

No hay nada más sobrecogedor que observar a la mujer que amo tomar el poder mientras la coronan como reina. Este día da la impresión de ser el principio de algo nuevo. Un punto de inflexión en las turbulencias de estas últimas décadas. Incluso el Alineamiento Celestial, que solo ocurre una vez cada cien años, ha llegado hoy para señalar la ocasión, para bendecir y santificar a las nuevas reinas.

Una luz diáfana centellea a través de los ventanales de vidrio policromado de la sala del trono de Aryd. Al principio de la coronación, la radiante luz del sol derramaba rayos de los colores del arcoíris sobre la tarima, pero el eclipse ya está a punto de comenzar.

A través de la ventana lunar sobre los invitados congregados, nuestras tres lunas, que flotan como discos oscuros delante del sol, se acercan poco a poco cada vez más.

A pesar de la creciente oscuridad, las dos mujeres que se encuentran sobre la tarima enfrente de mí resplandecen bajo la luz de los braseros y los faroles que hay por toda la cámara, consiguiendo que las joyas que adornan sus vestidos de gala a juego emitan destellos cegadores. Las hermanas gemelas Esha y Lillnya, de solo veinte solsticios de verano de edad, idénticas en gracia y belleza, se arrodillan ante la multitud de autoritarios y gobernantes.

Pero a mí solo me importa una de ellas.

Esha.

Ella es mi todo. Mi compañera de corazón. Mi compañera de lazo. Jamás nos separaremos. Siempre nos encontraremos, incluso en todas las futuras vidas que podamos tener.

Siempre.

Y, ahora que ella es la reina, juntos seremos imparables.

Me permito recorrer con la mirada la curva de su mejilla, la línea de su mandíbula, la espiral de su oreja, la forma de su cuello. Quiero llevar la boca a ese punto que sé que le hace estremecer con un mero roce. Tal vez cuando haya terminado la coronación. Tengo una fantasía de lo que quiero que haga