: Jean Grondin
: Paul Ricoeur
: Herder Editorial
: 9788425442360
: 1
: CHF 7.50
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: Allgemeines, Lexika
: Spanish
: 172
: kein Kopierschutz
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: ePUB
Paul Ric?ur es uno de los filósofos franceses más importantes del siglo XX. Su trabajo aborda temas como la voluntad, la acción, la identidad, la cuestión del tiempo, la historia, la interpretación, la lengua, el texto o la realidad. Su profunda mirada sobre las ciencias humanas aporta un pensamiento responsable y reflexivo sobre la existencia humana. Este libro es una breve introducción a la prolífica obra del pensador francés. Ante esta compleja tarea de aproximación, Jean Grondin ha tomado como hilo conductor en el itinerario del filósofo la cuestión de la hermenéutica, puesto que es la que más se acerca a su método de lectura y en cómo Ric?ur se comprendió a sí mismo en su recorrido intelectual. De esta manera, la lectura de estas páginas ofrece la comprensión del pensamiento de un filósofo que ha hecho justicia a la complejidad de los fenómenos humanos iluminándolos desde todos los ángulos posibles.

Jean Grondin (1955) es un destacado filósofo canadiense, doctor en Filosofía por la Universidad de Tubinga (1982) y profesor titular de la Universidad de Montreal desde 1991. Sus trabajos se centran en la filosofía alemana, la historia de la metafísica, la fenomenología, la hermenéutica, la filosofía de la religión y la del sentido de la vida. Es autor de una veintena de obras que han sido traducidas a una docena de lenguas.


Introducción

¡Ricœur! Todo oído que funcione con normalidad captará en ese nombre armonioso dos de las más bellas palabras de la lengua francesa. Del nombre no era él responsable, pero ciertamente era un hombre con un corazón enormemente generoso (algo que a veces hasta se le reprochaba), del que se conocía también un cierto lado malicioso. Paul Ricœur (1913-2005) fue uno de los filósofos franceses más importantes del sigloXX, y ciertamente uno de los más leídos fuera de Francia. Su pensamiento ejerció y continúa ejerciendo una profunda influencia en todas las ciencias humanas, de las que también fue uno de los más brillantes teóricos. Su obra, rica y compleja, se despliega en una sucesión de obras a menudo impresionantes en las que no siempre es fácil encontrar el hilo conductor. No encontramos entre ellas la que verdaderamente pudiera llamarse la obra maestra, pero sí superabundan los libros que podrían reclamar, todos, ese título:Filosofía de la voluntad (publicado en dos grandes volúmenes en 1950 y 1960),Historia y verdad (1955),Freud: una interpretación de la cultura (1965),El conflicto de las interpretaciones (1969), Lametáfora viva (1975),Tiempo y narración (tres tomos, 1983-1985),Del texto a la acción (1986),Sí mismo como otro (1990),La memoria, la historia, el olvido (2000),Caminosdel reconocimiento (2004), por nombrar solo los más destacados. ¿Hay algún hilo conductor que atraviese todas estas obras?

1. El corazón de su pensamiento

No deberíamos reducir el pensamiento de Ricœur a un único tema, a menos que queramos forzarlo, pero en una primera aproximación podemos decir que fue todo él una agradable filosofía de las posibilidades del hombre: enraizado en la tradición francesa reflexiva, el personalismo y el existencialismo, su primera (y quizá su constante) obra fue unaFilosofía de la voluntad que desembocó, en sus últimos libros, en un pensamiento del hombre capaz, al término de un itinerario que no cesó nunca de tener en cuenta la aportación de todas las disciplinas y de todos los campos que tenían algo que decir sobre las posibilidades del hombre. La noción de posibilidad evoca aquí varias cosas que Ricœur piensa a la vez: es la capacidad de «com-prensión», característica frecuente de los grandes pensadores. El lector moderno quizá entienda aquí sobre todo la capacidad conquistadora de emprender tareas, conocer y dominar la naturaleza. Eso forma parte del hombre, naturalmente, pero por «posibilidad» hay que entender también que el hombrepuede sufrir, que puede no estar a la altura de sus posibilidades, que por tanto puede obrar mal, pero que también puede actuar, hablar, contar sus experiencias, mantener promesas, perdonar, ser rozado por lo divino. Son posibilidades que otros seres no poseen en igual medida, pero todas ellas definen ese esfuerzo por existir que somos.

El pensamiento generoso de Ricœur está atento a todo lo que ese esfuerzo por existir puede conseguir, sobre todo mediante el lenguaje que narra su experiencia, y esta es la razón de que ese pensamiento sea hermenéutico. Parafraseando a Terencio, nada humano le es ajeno, pero sobre todo: nada que se haya dicho a propósito del hombre, con los mitos, las religiones, la literatura, la hi