: Fernando Montes Ponce de León
: Los sistemas de control de tráfico y señalización en el ferrocarril
: Universidad Pontificia Comillas
: 9788484684237
: Biblioteca Comillas, Ingeniería
: 2
: CHF 17.30
:
: Schienenfahrzeuge
: Spanish
: 396
: Wasserzeichen
: PC/MAC/eReader/Tablet
: ePUB
Este libro, con un carácter eminentemente didáctico, está escrito con la finalidad de ayudar a entender los sistemas de control y señalización en el ferrocarril. Está dirigido principalmente a los alumnos que comienzan su andadura en el conocimiento del ferrocarril. El autor ha tratado de recoger su experiencia de muchos años de ejercicio de la profesión, siendo su valor también importante para todos aquellos profesionales que se quieran iniciar en este sector. Sin pretende ser un tratado científico el autor ha intentado ser riguroso en la explicación de los fundamentos físicos y técnicos de los equipos y sistemas de integran este área tecnológica, relativamente desconocida para los no especialistas en el sector.

Fernando Montes Ponce de León, Ingeniero del ICAI de la promoción de 1965, ha desempeñado un muy reconocido y relevante papel en el mundo ferroviario, reconocido nacional e internacionalmente como una autoridad en la materia, especialmente en los sistemas de señalización y de seguridad ferroviaria, y más concretamente en el ERTMS. Es miembro de dos importantes ingenierías ferroviarias en el Reino Unido, fue profesor en el Máster Universitario en Sistemas Ferroviarios del ICAI (2001-2013) y en el Máster de Ferrocarriles en la Universidad Politécnica de Valencia. También, es miembro de varios Comités Técnicos Internacionales del ámbito ferroviario y cofundador del comité del Foro ICAITREN de la Asociación Nacional de Ingenieros del ICAI. Autor y coautor de varios libros, que junto al presente texto, editado por la Universidad Pontificia Comillas, sirven de textos en las Escuelas correspondientes. Su prestigio ha supuesto que en marzo de 2017 fuera elegido, por un plazo de tres años, por el Congreso de los Diputados, presidente de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF) como técnico independiente, sin tener ninguna actividad de tipo político. Este puesto supuso un reconocimiento a su carrera por haber realizado actuaciones profesionales de incuestionable mérito y aportaciones notables al prestigio de la profesión. En su actividad profesional en la empresa privada, en la que alcanzó el nivel de director técnico, ha dirigido numerosos proyectos de relevancia y ha coordinado a empresas multinacionales en proyectos de gran envergadura, tanto de ámbito nacional (Madrid, Barcelona) como internacional (Reino Unido, Australia, Alemania, Bélgica). Con aportaciones importantes a los sistemas de conducción automática y a los sistemas de seguridad. Además de los destacados servicios a la profesión relacionados anteriormente, ha simultaneado su actividad en el mundo de la empresa privada con labores docentes. Muchos Ingenieros del ICAI han disfrutado de sus enseñanzas.

Capítulo 1: Los sistemas de señalización en el ferrocarril: su evolución

CAPÍTULO 1
LOS SISTEMAS DE SEÑALIZACIÓN EN EL FERROCARRIL: SU EVOLUCIÓN

¿Qué es la señalización en el ferrocarril? ¿Cómo empezó? ¿Qué papel juega en el transporte ferroviario?

Pocos viajeros del tren se percatan del papel fundamental que desempeña elsistema de señalización, o como hoy se le empieza a designar en Europa,sistema de mando y control, capaz de proporcionar tanto seguridad en la circulación de los trenes como su regulación, contribuyendo a optimizar la capacidad de transporte de las líneas.

La principal función-objetivo del ferrocarril es el transporte de viajeros y/o mercancías. Es decir, transportar el mayor número posible de viajeros o mercancías por hora y en el menor tiempo posible, función que debe tener muy en cuenta la seguridad.

Esta función-objetivo está influida por muchos factores; entre ellos, y de manera especial, destacan los sistemas de señalización, esto es, los sistemas de mando y control que proporcionan la seguridad en el movimiento de los trenes.

En este capítulo se expone, de manera sucinta, una introducción con la evolución de la señalización, las causas más importantes que la han motivado, la situación actual de los sistemas de mando y control, y su posible evolución futura, con la idea de ayudar en la comprensión de las materias que se van a tratar en este libro.

El nacimiento de la señalización está estrechamente unido a la aparición del ferrocarril.

Desde un primer momento fue necesario disponer de unos “policías ferroviarios” (guardavías) que, conociendo dónde estaban los trenes, autorizaran su puesta en circulación.

Pero la creciente demanda de este medio de transporte, y el consiguiente aumento del número de trenes en circulación, reveló la insuficiencia de este sistema: el guarda vías, debía atender simultáneamente a varios trenes lo que dio lugar a incidentes.

1. Las señales

Casi simultáneamente aparecen las señales a pie de vía. Primero son meras banderas. El color rojo indica “alto” o parada. Hoy día se conservan en el RGC (Reglamento General de Circulación) los banderines de parada y marcha de los trenes. Hacia 1840 se sustituyen por discos maniobrados a pie de vía, evolucionando a las señales mecánicas poco tiempo más tarde.

La velocidad de los primeros trenes era reducida y su peso no muy grande, por lo que la distancia de parada necesaria para detener al tren era más bien corta. El distanciamiento entre trenes (separación para mantener la seguridad) se hacía por horario (separación por tiempo entre trenes por el cumplimiento del libro horario). Por entonces el tráfico ferroviario no estaba congestionado, y los viajes se hacían durante el día.

Fig. 1a

Para responder a las expectativas de desarrollo creadas por el ferrocarril, fue necesario realizar y poner en circulación más trenes, con velocidades más altas, más largos y con mayor peso. Los procedimientos existentes para controlar y parar un tren fueron insuficientes y fue necesario crear nuevas señales que respondieran a los nuevos requerimientos de seguridad y control.

Así surgen las primeras señales mecánicas (Figura 1 a y b), situadas a pie de vía en un poste fácilmente visible por los maquinistas y por el factor de circulación.

Fig. 1b

La primera señal fue el “Disc and Crossbar”, formada por un disco en la parte superior que cuando se presenta de frente a la marcha, indica alto; y cuando se gira, muestra una pletina de forma rectangular indicando vía libre. La señal disponía también de un farol de aceite para ser vista por la noche. La señal de disco se utilizó por los FF.CC. españoles hasta final de siglo y todavía hoy existen líneas que mantienen esta indicación.

En el año 1841 aparece un nuevo tipo de señal, el semáforo. Esta señal consiste en un poste de aproximadamente cuatro metros de alto, con un brazo que extendido en su posición vertical significaba vía libre, inclinado 45º indicaba precaución, y horizontal indicaba parada. Para poder circular por la noche y aumentar el número de trenes por la línea, el semáforo iba equipado en un lateral con unos cristales, detrás de los cuales se colocaba un farol de aceite. La primera instalación de este tipo se realizó por la Compañía M.Z.A. en Mataró perteneciente a la Red Catalana (Semáforos GRSC). Desde un primer momento, las condiciones de funcionamiento seguro de los equipos de señalización caracterizaron su diseño.

Las señales se concibieron de forma que el aspecto más restrictivo, parada, correspondía con la posición del brazo “caído” a su posición horizontal, es decir, que si algún elemento se rompía, la acción de la gravedad lo llevaba a la posición horizontal, correspondiente al estado de mayor seguridad. Cuando esta condición no estaba clara