: Varios Autores
: Identidad cosmopolita global
: PPC Editorial
: 9788428829823
: Educar Práctico
: 1
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: Allgemeines, Lexika
: Spanish
: 288
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La responsabilidad social y ambiental tiene un carácter de urgencia en nuestro hoy de grandes brechas sociales y económicas en el que tantas circunstancias están rompiendo el equilibrio de la naturaleza y nos hacen sentir que el planeta está amenazado. Un tiempo a la vez de grandes posibilidades que, orientadas hacia el bien común, pueden hacer real que todas las personas podamos gozar de buenas condiciones de vida para un desarrollo armónico del ser humano en el universo. El diseño de una estrategia competencial de Educación para el Desarrollo Humano se enfoca desde lo más grande de la persona y para la persona: la identidad cosmopolita y la dimensión existencial, lo cual implica abandonar la zona de confort. Mujeres y hombres nuevos para un mundo nuevo.

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¿Podremos vivir juntos? Construcción de una Identidad Cosmopolita Global vivida


 

LUIS ARANGUREN GONZALO1

 

 

A finales del siglo pasado, el sociólogo francés Alain Touraine sorprendió con un libro cuyo título era¿Podremos vivir juntos?2Sin duda acertó a formular la pregunta clave con la que se debía despertar el sigloXXI. Unos años más tarde sigo persuadido de que el modo de configurar la convivencia entre diferentes es la asignatura clave para poder aprobar nuestro nivel de humanidad. Esta intuición es la que persigue el presente documento de reflexión. Tratamos de construir una identidad cosmopolita global en un mundo donde perviven las luchas identitarias particulares y se globaliza el casino global en manos de muy pocos. Por eso hemos de ser muy lúcidos para acertar a ver lo importante y descartar lo intrascendente, y no al revés. Y esto significa abrir bien los ojos.

 

En cada época, los hombres no son capaces de ver algunas cosas. Y en esto, por descontado, se incluye también nuestra propia época. Vemos cosas que nuestros antepasados no veían; pero había cosas que sí veían y nosotros ya no vemos; y sobre todo hay incontables cosas que nuestros descendientes verán y que nosotros todavía no vemos, porque también nosotros tenemos nuestrospuntos ciegos3.

 

Amin Maalouf pone el dedo en la llaga en uno de los males de cada época: no ser conscientes de que hemos estrenado una nueva época. La globalización ha derrumbado las fronteras políticas y económicas propiciando que la economía sea el auténtico soberano de nuestros destinos. Como consecuencia, las gentes que peor lo pasan y que no pueden sobrevivir en sus lugares de origen marchan a otras tierras en busca de un porvenir. El fenómeno migratorio contiene una gama de intensidades diversa; en todo caso, este dato modifica el mapa de la convivencia.

Hace décadas, en