Salen a un tiempo por dos puertas Abindarráez y Jarifa. Sin verse.Abind. Verdes y hermosas plantas,[6] Que el sol con rayos de oro y ojos tristes Ha visto veces tantas Cuantas ha que de un alma el cuerpo fuistes; Laureles, que tuvistes Hermosura y dureza: Si no es el alma agora[7] Como fué la corteza, Enternézcaos de un hombre la tristeza,[8] Que un imposible adora.Jarifa. Corona vencedora De ingenios y armas, Dafne, eternamente Por quien desde el aurora Hasta la noche llora tiernamente El sol resplandeciente: Si no habéis de ablandaros Al són del llanto mío, ¿De qué sirve cansaros, Y mi imposible pretensión contaros, Que al viento sólo envío?Abind. Claro, apacible río, Que con el de mis lágrimas te aum